Díptico de cuadros abstractos en grises y amrillo mostaza.

Se realiza pintado a mano en lienzo sobre bastidor de madera de 3-3,5 cm de grosor, con los cantos pintados continuando la pintura, consistente en una composición abstracta simulando un skyline con reflejos en tonos amarillo, ocre, marrones y negro sobre un fondo sucio en grises y blanco con textura en todo el motivo para resaltar las formas geométricas que destacan sobre dicho fondo gris. Se utilizan para su ejecución colores acrílicos de Bellas Artes y resinas acrílicas para las texturas, mezcladas con el color. El resultado es armonioso y delicado, muy indicado para espacios abiertos y amplios, pudiendo sustituir a cualquier cuadro de gran formato en el salón, dormitorio o cualquier otro ambiente decorativo, como oficinas o negocios.